Aprieta la espada con garras de acerado filo; cerca del sol por vastedades solitarias, ella está en guerra con el mundo celeste. La tierra yerma por debajo gime; el àguila mira las estrellas que arden en su pecho y deja oir su voz como un rayo que hiere el Sahara y cae desde entonces, como una lluvia de ardientes y azules destellos sobre las calcinada arenas .

martes, 15 de febrero de 2011

Corazón de piedra

Corre por mis venas un odio tan grande
que las corrompe, se quiebran, se mueren
y la sangre que de ellas se derrama
estalla de rencor contra tu nombre.


Porque me obligaste a odiarte,
a querer despedazarte hundiendo aceradas garras
por tu piel de ave errante
para contagiar el odio que tú mismo me entregaste.

Por eso también quiero suplir el regalo que me diste
porque pese al mar de penas que me ahoga entre lamentos
igualmente te quisiera agraviar cada momento
y mi corazón entero transformar en una piedra.

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